Especie nativa de Chile y Argentina. En Chile crece desde el sur de la provincia de Colchagua hasta la provincia de Aysén.

Árbol monoico de follaje perennifolio, de copa con ramas abiertas y estratificadas, su corteza es lisa gris oscura, con grietas longitudinales al madurar. Sus hojas son simples, aovado-lanceoladas, de 2 a 3,5 centímetros de longitud, verde oscuras, agudas en el ápice y fuertemente aserradas en su borde. Flores en  inflorescencias axilares, cortas, no vistosas. Sus semillas son nueces amarillas, en grupos de 3, las laterales trialadas y bialada la central, de 3,5 a 4,5 milímetros de longitud. Semillas internas, solo desprendibles mecánicamente.

Es una especie de amplia tolerancia, ya que crece desde el nivel del mar hasta sobre los 1.000 metros de altitud. Prefiere suelos húmedos. Su madera es fácilmente trabajable, excelente para toda clase de construcciones por su considerable resistencia mecánica y a la pudrición.

Como especie ornamental es de singular belleza, por la hermosa arquitectura estratificada de su copa. Su rápido crecimiento y follaje siempre verde lo hace ideal para amplios jardines, parques y bandejones amplios. La bifurcación temprana que presenta esta especie se corrige con podas de formación. Como bonsái se logran ejemplares muy hermosos para jardines pequeños.

En Temuco es posible encontrarla en Parque Estadio Municipal Bicentenario; Campus Norte Universidad Católica de Temuco; avenida Paula Jaraquemada; Santa Elena de Maipo, Avenida Simón Bolívar, Parque Urbano Isla Cautín.